Una empresa cooperativa de limpieza decidió intentar sustituir todos los productos que contenían sustancias químicas peligrosas por alternativas más seguras.
Se sustituyó un producto desodorante utilizado en la limpieza de cuartos de baño que contenía hidróxido de sodio y formaldehído (sensibilizante y Cancerígeno) por un producto que tiene en cuenta criterios tanto sanitarios como medioambientales.