Como capitán o teniente, eres responsable de dirigir las operaciones. Supervisan y coordinan las acciones en el lugar de los hechos, deben tomar decisiones rápidas en situaciones estresantes y dinámicas y son responsables del bienestar de su equipo.
Aunque tu función principal suele ser administrativa dentro de un cuerpo de bomberos, es importante que conozcas los posibles riesgos laborales asociados a tu puesto.
Al igual que en el caso del bombero, una de las principales preocupaciones es la posible exposición a materiales peligrosos y toxinas liberadas durante los incendios. Para minimizar este riesgo, también es esencial llevar un equipo de protección individual (EPI) adecuado y cumplir las normas de seguridad, así como descontaminar las zonas contaminadas del cuerpo lo más rápidamente posible con jabón y productos sin penetrantes.
Los controles de salud periódicos, la formación continua en seguridad y la concienciación sobre los peligros potenciales contribuyen a una carrera más saludable y sostenible en la extinción de incendios y otros servicios de emergencia. Dando prioridad a las medidas de seguridad, utilizando equipos de protección y cumpliendo estrictamente las directrices del sector, los capitanes y tenientes de bomberos pueden reducir significativamente los riesgos cancerígenos potenciales asociados a su profesión. Los reconocimientos médicos periódicos, la formación continua en seguridad y la concienciación sobre los peligros potenciales contribuyen a una carrera más saludable y sostenible en la lucha contra incendios y la respuesta a emergencias.