No se dispone de estimaciones del número actual de trabajadores expuestos al cloruro de vinilo en la UE. En 1993, se estimó un número de 40.000 trabajadores expuestos para la UE de los 15.
La exposición al cloruro de vinilo se produce principalmente por inhalación. Una exposición prolongada puede provocar cáncer en el hígado, el cerebro, la sangre y los pulmones. El cloruro de vinilo tiene una clasificación armonizada según el reglamento CLP de Categoría Cancerígeno 1A, lo que significa que puede causar cáncer en humanos.
Dónde se producen los riesgos
La principal vía de exposición profesional al cloruro de vinilo es la inhalación, que se produce principalmente en las plantas de (poli) cloruro de vinilo (PVC) y en las plantas de transformación del PVC (incluidos el envasado, el almacenamiento y la manipulación del cloruro de vinilo). Corren riesgo los trabajadores de los sectores de fabricación de productos químicos industriales, productos plásticos, productos metálicos fabricados o maquinaria, así como los trabajadores ocupados en servicios relacionados con el transporte y la construcción.
Más sobre la sustancia
El cloruro de vinilo es un gas incoloro que arde fácilmente. Tiene un olor suave y dulce, pero el olor no es una advertencia adecuada de concentraciones peligrosas. No se produce de forma natural y debe producirse industrialmente para sus usos comerciales. El cloruro de vinilo se utiliza principalmente para fabricar PVC; el PVC se utiliza para fabricar diversos productos plásticos, como tuberías, revestimientos de cables y alambres y materiales de envasado. El cloruro de vinilo también está presente en el humo del tabaco.
Peligros que pueden ocurrir
La exposición aguda al cloruro de vinilo puede provocar síntomas como debilidad, mareo, fatiga, pérdida de peso, entumecimiento y hormigueo de las extremidades, alteraciones visuales y, en casos graves, coma y muerte. También puede irritar los ojos, la piel, las mucosas y las vías respiratorias. A niveles de exposición bajos, el organismo es capaz de procesar el cloruro de vinilo y excretarlo por la orina. La exposición crónica puede causar daños hepáticos permanentes y cáncer de hígado, síntomas neurológicos o de comportamiento y cambios en la piel y los huesos de la mano.
El período de latencia entre la exposición y los cánceres relacionados con el cloruro de vinilo varía mucho según los distintos tipos de cáncer.
Qué puedes hacer
La forma más eficaz de evitar la exposición es sustituirlos por productos sin cloruro de vinilo o con menor contenido de cloruro de vinilo. Si los productos que contienen cloruro de vinilo no pueden sustituirse, la exposición al cloruro de vinilo debe reducirse mediante controles técnicos, por ejemplo, sistemas cerrados. En caso de que esto no sea posible, instala sistemas de ventilación que no produzcan chispas y proporciona lavaojos y duchas de seguridad si existe riesgo de contacto o salpicaduras. Realiza periódicamente mediciones representativas de la exposición para saber cuándo y dónde hay que actuar.
Haz que los trabajadores sean continuamente conscientes de los efectos de la exposición y anímales a informar de los primeros síntomas. Además, forma a los trabajadores sobre los peligros, las prácticas laborales seguras y las medidas higiénicas eficaces. El equipo de protección personal (EPP) sólo debe utilizarse como último recurso, tras introducir las posibles soluciones de ingeniería. El EPP incluye gafas de seguridad, ropa y guantes resistentes a los productos químicos (resistentes a los productos químicos o aislantes) y respiradores.
Referencias: cancer.gov, OSHA, IARC, CDC