Como técnico de mantenimiento de armas, tu función consiste en inspeccionar, reparar y mantener armas de fuego y otro armamento utilizado en entornos militares, policiales o de seguridad. Aunque tu ocupación no implique directamente la exposición a sustancias cancerígenas, es esencial que conozcas los posibles riesgos laborales, incluidos los relacionados indirectamente con los riesgos cancerígenos en el ámbito del mantenimiento de armas.
Los riesgos cancerígenos en el mantenimiento de armas pueden derivarse de la exposición a determinados productos químicos, disolventes y materiales utilizados en la limpieza, lubricación y conservación de armas de fuego. Por ejemplo, algunos productos de limpieza, desengrasantes y lubricantes pueden contener compuestos cancerígenos o compuestos orgánicos volátiles (COV) que pueden plantear riesgos para la salud si no se manipulan o ventilan adecuadamente.
Para mitigar estos riesgos, los técnicos de mantenimiento de armas deben priorizar las medidas de seguridad y adherirse a las mejores prácticas en su entorno de trabajo. Esto incluye utilizar sistemas de ventilación adecuados y seguir los protocolos de seguridad establecidos para ayudar a reducir la exposición a sustancias nocivas en el lugar de trabajo. Utilizar equipos de protección individual (EPI) adecuados, como guantes y mascarillas, al manipular productos químicos y disolventes.